Salimos de la paz de Palolem (aunque ya estaba saturandose de turistas) para entrar en la paz de Hampi.
Hampi es un pueblito pequegno, tranquilo... que aunque no lo parezca fue la capital de un imperio invencible por más de dos siglos. Fue tan poderosa como Roma. Pero hace casi 500 años su desarrollo se detuvo en el tiempo y la ciudad, que llegó a tener 500.000 habitantes, quedó prácticamente vacía.
La ciudad fue la capital del Imperio de Vijayanagara desde su fundación en 1336, un lugar salpicado de templos y palacios de oro y plata, que mantuvo su esplendor durante 200 años debido a que tenia el monopolio en la venta de especies y algodón. Pero de pronto, por una de tantas guerras olvidadas este lugar quedo practicamente abandonado.
Hampi Bazar (el centro habitado) presidido por el templo de Virupaksha, esta rodeada por ni mas ni menos que 20 hectareas de templos dispersos y gran multitud de roca granitica que hacen de Hampi un gran lugar para los escaladores.
Hampi esta dividida en dos partes... una alrededor del tempplo de Virupaksha y otra al otro lado del rio, llamada la ciudad de los israelitas, donde no hay nada mas que apacibles guest house, algun templo y un gran lago para bagnarse.
En el Hampi urbano al parecer hay un nuevo jefe de policia (o al menos esa era la excusa) que ha prohibido el alcohol, ha puesto "toque de queda" a las 22.00 de la noche y ni siquiera se puede jugar a las cartas en lugares publicos!!
A pesar de todo esto Hampi es un buen lugar para seguir en la linea y pasar otros dias de relax.